El Salmo de la Televisión: Cuidado con lo que ves
Se ha utilizado el Salmo 23 para adaptarlo a nuestros días, ante la importancia que se le da a la televisión en el hogar. Ríe un poco, pero reflexiona también.
La televisión es mi pastor, nada me faltará.
En delicados sillones me hará descansar;
me desviará de la fe; destruirá mi alma.
Me guiará por sendas de sexo y violencia
por amor al patrocinador.
Aunque ande en valle de sombra de mis
responsabilidades cristianas,
no temeré interrupción alguna
porque la televisión está conmigo.
Sus colores y control remoto
me infundirán aliento.
Aderezas comerciales delante de mí
en presencia de mi mundanalidad.
Unges mi cabeza con humanismo y
materialismo; mi codicia está rebosando.
Ciertamente la flojera y la ignorancia
me guiarán todos los días de mi vida;
y en mi casa mirando televisión moraré
por largos días.
Cuidado con lo que ves en la televisión. No permitas que sus programas llenen tu mente de malas costumbres y te alejen de Dios.