Llevado por un caballo: Cuando no haces la voluntad de Dios
Reflexión: Llevado por un caballo.
Un joven campesino solía llegar a la casa de su novia en su hermoso caballo blanco, ante la mirada de los vecinos que contemplaban esa escena todos los días.
En una oportunidad, cuando el joven enamorado llegaba a visitar a su novia, una vecina cristiana, que conocía al muchacho en la iglesia, salió a su encuentro para decirle que no debería casarse con la chica, pues no seguía las enseñanzas de la Biblia.
"Ella no es la esposa que Dios tiene preparada para ti", le dijo la mujer.
El joven confundido, le costaba aceptar lo dicho por la mujer como un mensaje de parte de de Dios, por eso le dijo a Dios en oración: "Señor, confirma por medio de una señal si es tu voluntad que esta joven sea mi esposa".
Unos días después, cuando el joven se dirigía a la casa de su novia, le vino a su mente una idea y oró a Dios diciendo: "Señor, si es tu voluntad que me case con ella, permite que mi caballo me lleve a su casa sin que yo tenga que guiarlo. De lo contrario que el caballo pierda el camino y me lleve a otro lado".
El joven se subió a su caballo y lo único que hizo fue ordenarle que se pusiera en marcha. El caballo sin vacilar tomó rumbo, como era costumbre todas las tardes. Sin que el joven lo guiara, el caballo llegó a casa de la novia.
Año y medio después su matrimonio fracasó a pesar de todos los esfuerzos que hicieron para que eso no sucediera.
El joven muy triste se lamenta ante su pastor preguntando: ¿Por qué fracasó mi matrimonio si tome la decisión después de consultar la voluntad de Dios?
Joven, le respondió el pastor, tú no hiciste la voluntad de Dios, tú hiciste la voluntad del caballo.
Pero no sea como yo quiero, sino como tú. Mateo 26:39.
- No permitas que un caballo dirija el destino de tu vida, hacer la voluntad de Dios es mucho mejor.
