Dios es mi guardador en medio del sufrimiento
Dios es bueno y soberano, pero, a pesar de saber esto, a muchos creyentes les cuesta entender por qué suceden cosas dolorosas en la vida. Se preguntan: ¿Por qué el Señor no me evitó este sufrimiento?
La pregunta se vuelve más intensa cuando leemos pasajes de la Biblia como el salmo 121:7, 8: “Jehová te guardará de todo mal; El guardará tu alma. Jehová guardará tu salida y tu entrada desde ahora y para siempre”.
Muchas personas interpretan esto como que Dios les evitará dificultades, sin embargo, lo que Él promete, más bien, es guardar sus almas. El Señor permite el dolor e incluso, a veces, lo provoca. Está consciente del sufrimiento, pero también se ocupa del significado más profundo de la situación. A menudo, las pruebas fortalecen nuestra fe, nos hacen más como Jesús y nos dan más compasión por los demás.
A veces, Dios puede usar las dificultades para evitar que vivamos mundanamente o que desaprovechemos las oportunidades. Su ayuda en medio de nuestro dolor nos ayuda más que el tratar de evitarlo. Por saber qué es lo mejor para nosotros, nuestro Padre celestial no nos evita el dolor, sino más bien nos permite soportar los problemas dándonos fortaleza y sabiduría.
Cuando los superamos, podemos ver, con gratitud, cómo Su mano tierna y misericordiosa nos guio a través de toda la situación. Tenemos una esperanza inmensa, sabiendo que Dios nos guardará en los tiempos más difíciles. Lea el salmo 121, y pídale al Señor que le recuerde sus verdades cuando afloren en su vida situaciones dolorosas.
Jehová te guardará de todo mal; El guardará tu alma. Jehová guardará tu salida y tu entrada Desde ahora y para siempre. Salmo 121:7-8.
Autor: Charles Stanley.