Biografía de John Newton: Autor del himno "Sublime Gracia"
Cuando John tenia 7 años, su madre murió y él se convirtió en un niño de camarote de un barco pesquero. Sus experiencias a través de los años en el mar fueron peligrosas y emocionantes. Una vez fue embriagado y llevado como parte de tripulación de un Barco de Guerra. Allí fue cruelmente tratado siendo golpeado y abusado. Luego de esta experiencia se enroló en un barco de esclavos y con el tiempo llego a ser el capitán.
Durante todo este tiempo John vagó lejos del Dios de su madre y de la Biblia. Más tarde escribió "Con frecuencia vi la necesidad de ser un cristiano solo para escapar del infierno, pero amaba el pecado y no estaba dispuesto a abandonarlo". Cada año caía más bajo en las garras del pecado y pronto estaba en tal estado que la tripulación lo despreciaba, considerándolo como un animal.
En una ocasión, el borracho capitán cayó por la borda pero sus hombres no hicieron mucho esfuerzo para rescatarlo. Simplemente tiraron un arpón que se clavó en su cadera y tiraron de la cuerda. Fue levantado como si fuera un pez grande. Debido a este suceso, John Newton cojeó por el resto de su vida, pero como él diría. "Cada paso es un constante recuerdo de la gracia de Dios sobre este desventurado pecador".
Cuando hubo tocado fondo en las vilezas, sintió la miseria en su vida y se volvió a la fe que había olvidado. Entregó su vida a Cristo, y fue su devoción de tal manera grande como grosera había sido su caída. Dejó su deleznable ocupación como traficante de esclavos y se entregó al ministerio. Al tiempo llegó a ser un clérigo anglicano.
Además de su labor pastoral, Newton, que había sido un despreciable negrero, realizó una abnegada defensa en contra de la esclavitud. Su vida fue de inspiración para muchos. Entre ellos se destaca William Wilberforce, un político ingles que luchó denodadamente a favor de la abolición de la esclavitud en el Imperio Británico, hecho que se concretó en 1833, merced al trabajo de este hombre.
John Newton, el fiel cristiano anglicano y autor de una de las melodías evangélicas más bellas de la historia, descansó con el Señor el 21 de Diciembre de 1807.
Letra y música del himno Sublime Gracia