Los buenos hábitos son la clave del éxito
¿Qué tal? Sinceramente, hoy quiero compartir contigo un gran secreto... bueno, en realidad es un secreto a voces, porque todos, de alguna manera, sabemos que esto que te voy a contar es muy cierto, pero a veces necesitamos que nos lo repitan constantemente. El secreto al que me refiero es que la clave del éxito son los buenos hábitos.
No importa si eres estudiante, ama de casa, trabajador de alto nivel o empleado general de alguna empresa; esto funciona para ricos y pobres; para gente que tiene buenas relaciones sociales y para gente que no las tiene. Es decir, esta es una verdad universal. En todos lados funciona.
Si deseas tener éxito en la vida (piensa en algo concreto en este momento como por ejemplo, obtener un buen empleo) lo podrías lograr llenándote de buenos hábitos que te encaminen hacia ese objetivo.
Pondré un ejemplo sencillo para explicar este tema y así animarte a emprender la carrera de acumulación de buenos hábitos.
Manuel era un joven que se había graduado de la universidad hacía dos años y aún no conseguía empleo. Él se encontraba deprimido, tanto, que se levantaba muy tarde todos los días y no hacía más que perder el tiempo en ver la televisión y salir a la calle a pasear. Todo en su vida se había vuelto un verdadero desorden y no sabía que hacer. Lo único que tenía claro, era que las cosas entonces no se presentaban fáciles... ¿Te suena familiar?
Como Manuel no hacía mas que pensar en lo malo, su depresión aumentaba y fue así, como dejó de salir a buscar empleo. "No hay trabajo" - decía, para justificar su pereza...
Aquí podemos identificar que Manuel estaba lleno de malos hábitos:
- Se levantaba tarde.
- Perdía el tiempo evadiendo su realidad con entretenimiento.
- Tenía una actitud negativa hacia el futuro.
- Había dejado de buscar empleo.
Estos cuatro hábitos en ningún momento harían que Manuel llegara a conseguir empleo, ¿cierto? Por la simple razón de que para encontrar empleo hay que buscarlo; para dar una buena imagen en la entrevista hay que tener actitud positiva... ¿quién contrata gente negativa? Definitivamente tampoco era buena idea evadir la realidad con distracciones, pues éstas solo estaban atrasando el momento de decisión que tarde que temprano, Manuel tenía que tomar. Y por último, nuestro amigo se había predispuesto a no encontrar empleo.
Ahora dime ¿qué quieres lograr tú? ¿Cuándo lo quieres lograr? ¿Qué malos hábitos te están impidiendo realizar lo que quieres? ¿Qué nuevos hábitos hay que agregar para que te lleven a donde quieres ir? ¿Listo?, está bien. Ahora un consejo más: da un paso a la vez.
¿Qué pasó con Manuel? Bueno, se dio cuenta que haciendo lo mismo, no podía esperar resultados distintos, por eso, decidió cambiar sus hábitos y ahora tiene un muy buen empleo.
Dejó de preocuparse por el futuro y empezó a ocuparse en el presente. Inició levantándose temprano para desayunar bien, bañarse y arreglarse. Luego, siguió buscando en el periódico ofertas de empleo, hasta que encontró uno. No era la gran cosa, pero lo tomó. El simple hecho de trabajar lo hizo sentirse mejor, y al poco tiempo, siguió cosechando más frutos de nuevos hábitos que iba adquiriendo, logrando así un progreso notable.
La historia de Manuel puede ser la tuya, tal vez en el campo profesional o en alguna otra área de tu vida... atrévete a eliminar los malos hábitos para cambiarlos por aquellos que te harán progresar.