Amor Oculto: manteniendo una relación amorosa en secreto
Raúl y Adriana se encuentran solos en la oscuridad de un parque. Son enamorados hace algún tiempo y todavía nadie lo sabe.
- ¡Te amo con todo mi corazón Adriana! Le dice Raúl mientras le da un beso.
- Sí, ya me lo has dicho varias veces Raúl, pero, ¿hasta cuándo vamos a estar así a escondidas? ¡Cómo quisiera gritar que te amo!
- ¡No! ¡Nadie debe saberlo Adriana! ¡Si se enteran tus papás nos matan!
- Pero yo quiero que se los digas Raúl, no está bien que nos veamos a escondidas. Cualquier día alguien nos puede ver y contárselo a los demás... Lo que Adriana no sabía es que Raúl tiene otra enamorada y por eso, no quiere que nadie se entere. ¿Será correcto mantener un enamoramiento secreto?
Si tanto el joven y la señorita no se aman, ambos querrán seguir en secreto. Solo están por “vacilón”, y no quieren nada en serio. Cuando uno está verdaderamente enamorado, NO PUEDE CALLARSE. Siente ganas de decirle a todo el mundo que tiene su pareja y que LO AMA. Solo desea hablar de su pareja.
El joven que no ama a Dios, no le interesa para nada estas cosas. Se va a la iglesia solo por ver que “incauta” puede hacer caer por allí. Y muchas veces las jovencitas se prestan para estas cosas, llamando la atención desmedidamente como “carnada” para ver que “pez” cae en su “anzuelo”. Solo les interesa agregar un nombre más a su lista de “conquistas” y no les importa dar mal testimonio. A veces buscan estar al frente en algún ministerio solo para impresionar y ser visto por los demás.
Jesucristo nos enseña que los cristianos somos la luz del mundo. “Vosotros sois la luz del mundo...” (Mateo 5:14). NO ES CORRECTO tener pareja en secreto porque los jóvenes cristianos somos LUZ DEL MUNDO y una luz no puede estar escondida. Las parejas que se ven a escondidas NO AGRADAN A DIOS. Cuando un joven es sincero en sus sentimientos no tiene porque estar ocultándolo. El verse a escondidas se presta a cometer cosas indebidas, como manoseos y exceso de caricias que no corresponden a un verdadero hijo de Dios. Jesús dice: “Porque todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a la luz, para que sus obras no sean reprendidas”. (Juan 3:20). Si tu pareja quiere seguir contigo en secreto es porque NO TE AMA.
Cuando un joven ama de verdad y es sincero en sus sentimientos, estará dispuesto a decírselo a los padres de su pareja y conversar con el pastor de la iglesia para evitar un mal testimonio. Presentará a su pareja ante sus amigos como su enamorada(o). Si no tiene buenas intenciones NO HARÁ NADA DE ESTO. No es malo tener pareja. ¡Es normal! ¡Dios nos hizo así! ¿Por qué escondernos o negarlo? El problema está en que muchas veces no se ora y no se escoge a la persona adecuada.
Las relaciones secretas son peligrosas porque para verse, tienen que hacerlo siempre a escondidas y en esta situación, es fácil caer en fornicación y malograr tu vida por el resto de tus días, teniendo un embarazo no planeado, ya que este ambiente favorece el sobrepasarse en las caricias. También porque es fácil terminar en cualquier momento y cambiar de pareja, ya que nadie se enteró.
El joven que verdaderamente ama a Dios evitará estar en lugares oscuros y en situaciones embarazosas con su pareja. No negará a su enamorada(o) y lo presentará ante los demás como tal. La relación de los jóvenes cristianos es diferente a la que tienen los jóvenes que aun no conocen a Cristo. Dios nos ha llamado a ser diferentes en toda nuestra manera de vivir. La Biblia nos dice: “Porque en otro tiempo erais tinieblas, más ahora sois luz en el Señor; andad como hijos de luz”. (Efesios 5:8). Qué eres tú, ¿luz o tinieblas?
También pueden existir jóvenes sinceros que no desean burlarse de los sentimientos de su pareja, pero están en secreto porque no tienen confianza con sus padres y quizás sus pastores o líderes han satanizado el enamoramiento diciendo que esto es pecado. A veces por tratar de ser más “espirituales” nos volvemos más ignorantes y causamos daño en la vida de los demás. Lo que los padres deberían hacer es tener más confianza con sus hijos y ser, más que sus amigos, sus mejores amigos. Los líderes deberíamos guiar en vez de condenar ya que esa es nuestra función y para eso nos llamó el Señor. Si no hacemos esto, los jóvenes buscarán consejo en personas inmaduras o incrédulas que los guiarán mal. El prohibirles tener pareja solo logrará que ellos mantengan un enamoramiento en secreto o escapen de su casa.
Esto no quiere decir que los padres o líderes deberían dejar que los jóvenes tengan los enamorados que quieran y no prohibirles nada. Lo que quiere decir es que debe existir confianza entre padres e hijos y, jóvenes con sus pastores, para que así recibiendo el consejo y la dirección de ellos, sepan esperar y escoger apropiadamente a su pareja cuando llegue el momento oportuno.
Algunos líderes llegan al colmo de no querer ni siquiera que jóvenes de ambos sexos conversen o se saluden, y los mantienen alejados como si en lugar de hijos de Dios fueran personas llenas de malos pensamientos. Es verdad que la carne es débil. Jesús lo dijo (Mateo 26:41). Justamente por eso deberían darles más confianza y comprensión para que no tengan que estar citándose a solas en lugares alejados y, lo hagan de preferencia bajo la mirada de sus mayores. En toda reunión de jóvenes es aconsejable que siempre esté por lo menos algún adulto presente, pero es un error grave prohibir la reunión de jóvenes, porque de todas maneras ellos verán la forma de encontrarse. Si se les prohíbe será peor.
Joven: si tu amas a tu pareja no sigan su relación a escondidas. Aunque tengan unos padres o líderes incomprensibles, tienen que decírselos. Ora al Señor. Si está en su voluntad, El les abrirá las puertas para que su relación siga adelante. Si tus padres se oponen, óyelos. Puede ser porque tu pareja es de mal testimonio y no te conviene, pero si no fuera así obedécelos. Si los separan ¿Qué te preocupas? ¿No dices que la amas? El verdadero amor permanece a través del tiempo y de las circunstancias. “El amor nunca deja de ser”.(1 Co. 13:8). Si solo fue ilusión, desaparecerá. Ora a Dios y espera en El.
Si estás con una jovencita a escondidas solo por pasar el tiempo, estás pecando contra Dios. Si eres una jovencita que ama a Dios NO PERMITAS ESO porque el joven no te ama. Lo más importante en la vida no es tener una pareja sino, hacer la voluntad de Dios. Autor: Víctor Zafra.