Técnicas efectivas para disciplinar a los hijos
Disciplina del Niño - ¿Qué es?
La disciplina del niño es uno de los elementos más importantes para una crianza exitosa, aún así, más y más padres no saben qué hacer. La disciplina (o entrenamiento) puede simplemente ser definida como un proceso para ayudar a los niños a aprender comportamientos apropiados y a tomar buenas decisiones. Adicionalmente, la disciplina amorosa, efectiva, ayuda al niño a ejercitar auto-control, responsabilidad, y respeto mutuo.
Mediante la disciplina apropiada, los niños aprenden cómo funcionar en una familia y en una sociedad que está llena de límites, reglas, y leyes que todos debemos respetar. Con ella, los niños obtienen un sentido de seguridad, protección, y a menudo de victoria. Sin la disciplina apropiada, los niños corren el riesgo de tener variados problemas emocionales y de comportamiento.
Disciplina del Niño - ¿Cómo funciona?
¿Cómo implementamos efectivamente la disciplina del niño? La Biblia dice que los padres tienen una responsabilidad dada por Dios de entrenar a sus hijos en el camino que deben seguir. Ese desafío a menudo requiere que aprendamos primero a disciplinarnos a nosotros mismos en la materia de la crianza de los hijos. Ya sea que las habilidades para la crianza nos vengan naturalmente o que las aprendamos a través de la prueba y error, se logran con la consistencia, el estímulo, y el ejemplo. La importancia de estas herramientas no puede expresarse suficientemente.
He aquí algunas técnicas efectivas para la disciplina del niño utilizando la instrucción:
Establezca límites y órdenes clara y concisamente. Como padres, no podemos volvernos atrás cuando nuestros hijos traten de regatear o negociar - y lo harán. Los niños nos probarán para ver si nos rendimos a sus ruegos persuasivos (sin importar la edad).
Debemos dar nuestras instrucciones calmadamente, aunque firmemente, no como un pedido vacilante. Es más efectivo decir: "No salgas a la calle. Quédate en el jardín", en lugar de: "Mami no quiere que te salgas del jardín, ¿bien?" Los niños deben saber cuando los padres hablan en serio.
Nuestra autoridad debe ser establecida claramente, consistentemente. Utilice sólo las palabras necesarias, y enseñe a sus hijos a desarrollar el contacto visual y aptitudes de audición. Muestre, mediante el ejemplo, que usted les escucha como usted espera que le escuchen.
Recuerde dar recompensas y consecuencias disciplinarias no sólo apropiadas con la edad, sino también apropiadas con la ofensa. No sobre castigue malas conductas menores.
Enseñe a su hijo que todas las acciones tienen consecuencias. Estimúlelos cuando tomen buenas decisiones. Ellos necesitan conocer los beneficios de la obediencia y del tomar buenas decisiones, así como las consecuencias negativas de la desobediencia.
Establezca directivas/resultados y hágales seguimiento; no pronuncie amenazas vacías. Diga consecuencias predecibles, tales como: "Si te comportas de esta manera, esto va a pasar".
Enséñeles buen comportamiento y moralidad exhibiendo su propio buen comportamiento y moralidad. Asista a la iglesia como familia. Planee sanas actividades familiares que promuevan la buena moral y el tiempo "juntos". Pronto verá a su hijo imitar sus valores y moralidad. La disciplina y el entrenamiento del niño no ocurren en un vacío. Sus conductas se forman dentro del contexto de lo que ellos vean en sus principales maestros.
Disciplina del Niño - ¿Cuándo debe Comenzar?
La disciplina del niño debe comenzar desde el principio. Usted debe disfrutar el cargar, abrazar, y hablar a su bebé. Estudios han reportado que los bebés responden a los sonidos de la voz humana. El hablar a su niño tempranamente, puede ayudar al desarrollo del cerebro de su niño, y entrenarlo para saber lo que esperamos por el tono de nuestra voz (ej.: "Mami te ama" o "Es hora de dormir ahora").
Su bebé aprenderá muy rápidamente que el llorar produce una respuesta. Cuando un niño tiene hambre y llora, se le da de comer. Comience a entrenar a su bebé a conocer los momentos en que será cargado y abrazado y los momentos en que necesita ser puesto en su cuna. El hablar, aunado con acciones, es como debe comenzar el entrenamiento del niño.
Muchos nuevos padres piensan en la disciplina sólo después de que comienzan los comportamientos negativos. Su niño no sabe automáticamente lo que se espera; usted debe pasar tiempo enseñándole. Aunque animamos a nuestros niños a aprender a tomar decisiones, ellos necesitan de nuestra guía. El convencerlos amorosamente, alabando lo positivo, es para su beneficio (y el nuestro). Desde el principio, esfuércese en sus responsabilidades como padre. Su niño se lo agradecerá.
¿Cuándo debe un padre comenzar a disciplinar a sus hijos? Aprenda por qué es importante en su desarrollo, y los principios básicos para hacerla efectiva.