El amor es la esencia de la Navidad - Reflexión Navideña
Se nos dice que la Navidad es una “época de alegría” y un “momento de gozo”. Pero, en tanto la Navidad se acerca, alguno están muy lejos de experimentar este contentamiento propio de las fiestas navideñas.
Estas personas están cansadas después de un largo año de arduo trabajo y los numerosos problemas que tuvieron que afrontar y que aún hacen frente a diversas dificultades de la vida.
Si este es tu caso, déjame decirte que a pesar de esa situación puedes experimentar la calma y la paz en esta Navidad. Tendrás que abandonar algo en tu ocupada vida para que puedas hacer espacio para algo mejor.
Abandona la preocupación y el desánimo, no dejes fuera las cosas verdaderamente importantes en la vida, como es la unión familiar, los buenos momentos con los hijos, estrechar lazos de amistad y proponerse a continuar luchando por la vida.
La Navidad es propicia para la reconciliación y se disfruta mejor cuando no está centrada en las decoraciones, regalos, o festividades, sino cuando el amor es el centro.
Recuerda que el amor es la esencia de la Navidad, pasando tiempo con la familia y recuerden el nacimiento de Jesús como el mas grande regalo dado a la humanidad y enfatizando el gran amor de Dios por nosotros.
Esta Navidad, toma tiempo para amar... porque Jesús te amó primero y entregó su vida por por ti, para darte salvación y vida eterna.
Recuerda que las festivas decoraciones, los deliciosos alimentos, los muchos regalos en Navidad, quedarán el olvido; pero el amor que habrás compartido y alimentado vivirán por siempre.
Si tu aún no has experimentado el hermoso amor de Jesús, el corazón y el alma de la Navidad, puedes hacerlo ahora. Todo lo que necesitas es invitarle a entrar en tu corazón y vida.