Origen del conflicto árabe-israelí: datos importantes para entender el asunto
El conflicto árabe-israelí es aquel entre el Estado de Israel y sus vecinos árabes, en particular los palestinos, que lleva muchos años sin resolverse.
Para entender mejor el conflicto actual entre el pueblo árabe e Israel. compartimos el origen del conflicto en "Tierra Santa" y datos históricos importantes, que le permitirán entender mejor la disputa de tierras en "Palestina" y posteriores enfrentamientos entre árabes e israelíes.
Israel nació como pueblo en el año 1312 a.C., dos mil años antes de la aparición del Islam en el 7mo siglo d.C. Dios dijo a los hijos de Israel que les entregaría una tierra como herencia eterna, y esa tierra pertenece a Dios, para que Él haga con ella como Él quiera (Lev. 25:23).
- Luego de que los israelitas conquistaran la Tierra Prometida en 1272 a.C., tuvieron completo dominio de la tierra por mil años. Después del año 70 d.C., otras naciones tomaron control de la tierra judía. La mayoría de la población fue esparcida alrededor del mundo y carecieron de patria hasta el 14 de mayo de 1948, fecha en que nació el moderno Estado de Israel. A pesar de su exilio, siempre permaneció por lo menos una cantidad mínima de judíos en la tierra.
- Los profetas hebreos declararon que Dios hizo un pacto entre el pueblo judío y la tierra de Israel que duraría mientras permanezcan el sol, la luna y las estrellas en el firmamento (Jer. 31: 35-37).
- Se menciona a Jerusalén más de 700 veces en la Tanaj, las Escrituras Hebreas (el Antiguo Testamento), mientras que en el Corán no se menciona una sola vez.
- El rey David estableció a Jerusalén como la capital de Israel, pero ésta nunca ha sido la capital de una entidad árabe o musulmana. Cuando los jordanos ocuparon a Jerusalén, nunca se procuraron hacerla su capital.
- Durante el segundo siglo, el emperador romano Adriano le puso el nombre de “Palestina” a la tierra para resaltar el nombre de los peores enemigos de Israel, los filisteos. A Jerusalén le puso “Aelia Capitolina”, en honor al nombre de su familia, Aelia.
- La ciudad de Jerusalén nunca ha tenido el mismo significado espiritual para los musulmanes como para los judíos. No existe evidencia de que Mahoma realmente la hubiera visitado. Mientras los judíos oran mirando hacia Jerusalén, los musulmanes siempre han orado en dirección a la Meca, con sus espaldas hacia Jerusalén.
- Jamás ha existido un estado árabe palestino. Aunque tribus árabes vivieron en la tierra después de la conquista musulmana en el siglo 7, tampoco tuvieron una entidad política autónoma. La tierra fue controlada a la distancia por gobernantes musulmanes hasta el 1917.
- Durante los años del Mandato Británico (1917-1948), sueldos más altos y un mejor nivel de vida atrajo a muchos árabes de Siria y Egipto. Bajo ese Mandato, ambos judíos y árabes portaban pasaportes identificándolos como “Palestinos”.
- En 1922, el 78% del área bajo el Mandato Británico al este del Río Jordán se convirtió en un estado árabe palestino, lo que fue llamado el Reino de Jordania, y el resto era destinado para Israel.
- En 1947, la ONU redujo el tamaño designado para los judíos, y aún así los árabes rehusaron el Plan de Partición, lo que les hubiera otorgado, en ese momento, el estado que exigen hoy día. Los judíos aceptaron el plan en 1948, pero los líderes árabes indicaron a su gente que se salieran de Israel, prometiendo que eliminarían a los judíos de la tierra y que luego podrían regresar. El 68% se fue sin haber visto un sólo soldado israelí. Así nació el problema de los “refugiados palestinos”, los que se han mantenido deliberadamente dentro de campamentos con el propósito de desprestigiar a Israel ante la opinión mundial.
- A la misma vez, los judíos que vivían en tierras árabes fueron forzados a huir de esos países, dejando atrás todas sus posesiones, debido a la brutalidad, la persecución, y las asonadas (“pogromos”) árabes.
- Se calcula que el número de refugiados árabes que salieron de Israel fue alrededor de 650,000. Los refugiados judíos forzados a salir de tierras árabes durante ese mismo período se calcula en igual número.
- Bajo el gobierno jordano, se profanaron los lugares sagrados de los judíos, y les fue negado el acceso a sus lugares de adoración. Bajo el gobierno israelí, todos los lugares sagrados musulmanes y cristianos han sido preservados, y están accesibles a personas de toda clase de fe.
- La Tierra de Israel es una unidad geográfica, desde el Río Jordán hasta el Mar Mediterráneo. Si fuera a dividirse nuevamente, según era antes del 1967, quedaría prácticamente sin protección. También es importante recordar que la denominada “Margen Occidental” es el centro de la tierra bíblica de Israel, lo que era la antigua Judea y Samaria. Esa región montañosa ofrece una ventaja estratégica de control a quienes la ocupan, además de ser el punto donde la lluvia cae y corre a ambos lados de la montaña. Sin ese territorio, Israel sólo poseería la orilla costanera, de unas 9 a 15 millas de ancho.
- Nunca hubo paz cuando la Margen Occidental y Jerusalén Oriental estuvieron controlados por los árabes entre los años 1948 y 1967. Si la devolución de la Margen Occidental pudiera traer paz al Medio Oriente, como tan frecuentemente se ha sugerido, ¿por qué nunca la hubo durante esos 20 años cuando estuvo en manos árabes? Si la Autoridad Palestina dice que estaría satisfecha que se le otorgue la autonomía de la Margen Occidental, ¿entonces por qué se formó en 1964 la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), cuando la Margen Occidental ya estaba bajo control árabe? ¿Por qué las naciones árabes declararon la guerra a Israel en 1967, cuando en ese momento poseían la Margen Occidental? ¡No fue para liberar a los palestinos, sino para destruir a Israel!
- El Convenio de la OLP todavía exige la destrucción del Estado de Israel. Ese documento fundamental siempre ha negado cualquier derecho de autonomía a los judíos, y nunca ha sido oficialmente enmendado. Israel le ha entregado a los palestinos la mayoría de los territorios de la Margen Occidental, según el Acuerdo de Oslo de 1993, y actualmente son gobernados casi en su totalidad por la Autoridad Palestina. Sin embargo, el liderato de la OLP aún tiene la intención de controlar todo el territorio de Israel, y no sólo la Margen Occidental y la Franja de Gaza, razón detrás de las “Intifada,” o levantamiento popular.
- El Sionismo es como un sueño cumplido, que aún continúa vivo al día presente. Este movimiento surgió a finales del siglo 19, en respuesta a su larga historia de antisemitismo, con el único deseo de que los judíos pudieran vivir tranquilamente en algún lugar según su tradición cultural y religiosa. El retorno del pueblo judío a su propia tierra es el cumplimiento de las promesas de Dios registradas en Su Palabra para estos finales tiempos. ¡Todavía faltan millones de judíos por regresar, y necesitan todo el terreno posible para ubicar a esos inmigrantes, que vienen desde el norte, sur, este y oeste!
- Para hacerle justicia al pueblo palestino, ¿será necesario formar un segundo estado árabe palestino? Ese estado ya existe, y es Jordania, donde una gran mayoría de los ciudadanos son palestinos. Además, existen por lo menos veinte estados árabes o musulmanes vecinos que los podrían acomodar, en contraste con un sólo estado judío.
- Israel es el único estado democrático en la región. Las autoridades israelíes se esfuerzan por tratar bien a los árabes que quieran establecer su hogar en Israel. Israel trata mejor a sus ciudadanos “palestinos” que los propios gobiernos de la Autoridad Palestina, Jordania, Siria, y Egipto.
No existen soluciones fáciles para este problema. Ore por todas las partes involucradas, tanto por los árabes musulmanes como los árabes cristianos, quienes con frecuencia quedan atrapados en medio de las hostilidades. Ore también por los jóvenes soldados israelíes, quienes tienen que tomar decisiones difíciles mientras enfrentan ataques mortales, como por los líderes políticos nacionales e internacionales, quienes necesitan la sabiduría de Salomón.
Los que creemos en la Biblia como palabra verdadera de Dios deberíamos analizar y comprender los siguientes versos:
Deuteronomio 32:8 – “Cuando el Altísimo hizo heredar a las naciones, cuando hizo dividir a toda la humanidad, estableció los límites de los pueblos según el número de los hijos de Israel”.
Joel 3:1 – “En aquellos días, y en aquel tiempo en que haré volver la cautividad de Judá y de Jerusalén, reuniré a todas las naciones, y las haré descender al valle de Josafat, y allí entraré en juicio con ellas a causa de mi pueblo, y de Israel mi herencia, a quienes ellas esparcieron entre las naciones, y repartieron mi tierra”.
Con información de Bridges for Peace.